martes, 13 de diciembre de 2016

Llegó la caravana Coca Cola a Mexicali con basura e imprudencia

La noche del 12 de diciembre, mientras muchos cachanillas se encontraban en la catedral por la celebración a la Guadalupana, un gentio de gente se puso a lo largo del recorrido de la caravana Coca Cola, anunciada por el nuevo presidente municipal, Gustavo Sánchez en su página oficial de Facebook.  


Tanta gente asistió que daban ganas de expresar "así fueran buenos para ir a la caravana contra la verificación vehicular", tal vez a Manuel Valenzuela, activista social quien organiza esas caravanas, debería ponerle foquitos a su carro para jalar más gente.

Pero bueno, hace años que la caravana Coca Cola no pasaba por la ciudad, ¿recuerdas el jingle del comercial que decía "llega la alegría, llega la alegría"? Pues llegó, era muy esperada, a varios mexicalenses los agarró por sorpresa y es que ¿a quién chingados se le ocurre hacer una desfile en plena hora pico por las avenidas más transitadas? Pero bueno, pobres de quienes estuvieron atorados en el tráfico por más de una hora al salir de sus trabajos, vida de Godinez.

Mensaje para los atorados en el tráfico por Coca Cola

Lo positivo del evento fue llevar cierta alegría o entretenimiento momentáneo a chicos y a grandes, no importa que el municipio ande operando en números negros, no importa que en enero 2017 suba la gasolina, lo bonito fue ver foquitos de luz blanca, que se dice que brillan por estar llenos de cocaína, bueno, eso fue un chascarrillo, es que hace poco vi El Lobo de Wall Street.

Fueron muchos los ciudadanos que le dieron cobertura al evento por medio de las redes sociales, después de lo "bonito" llegaron ciertas denuncias echas en los grupos relacionados a Mexicali, por ejemplo, un llamado de atención a la imprudencia de los padres de familia que se encontraban en el puente peatonal en frente de Vicerrectoria, donde niños estaban sentados en el mismo y por algún descuido (que afortunadamente no sucedió) podían caer de este.



El segundo problema fue la basura que dejó el desfile, ese confeti grande que un usuario denunció a la altura de Proconsa de la avenida Lázaro Cardenas. Por ahí me indicaron que en un fragmento del recorrido habían barredoras limpiando la basura.

El hecho de que Mexicali sea la ciudad más contaminada del país le da una ventaja más para conservar el título, lo bueno es que Gustavo Sánchez declaró que no este año no habrá renta de suelo para venta de fuegos artificiales, menos mal.





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